Declaración Conjunta de
los cuatro países en respuesta a la intervención del Ministro de Asuntos
Exteriores de Qatar ante la XXXVII Sesión del Consejo de Derechos Humanos.
Sr. Presidente:
La Delegación Permanente de cada uno de los Emiratos
Árabes Unidos, del Reino de Arabia Saudí, del Reino de Bahrein y de la
República Árabe de Egipto desean utilizar el derecho a responder a la
declaración del Ministro de Asuntos Exteriores de Qatar, el cual pretendió, por
segunda vez, inquietar a su ilustre Consejo por una cuestión de crisis
diplomática, cuya mecha ha sido encendida por ellos mismos y hacer entender que
las gestiones que se están llevando a cabo para comercializar esta crisis
secundaria en los foros internacionales y regionales como si fuera una
importante crisis internacional que merece llamar la atención de la comunidad
internacional, en realidad, no merece atención alguna. Creemos que esta pequeña
crisis política entre nuestros países y Qatar, debe ser resuelta en el marco de
los esfuerzos de la mediación existente de Kuwait que
lidera Su Alteza, el Jeque Sabah Al-Ahmad Al-Jaber Al-Sabah cuyos esfuerzos y gestiones
reciben el pleno apoyo y aprecio de los líderes de nuestros países, y la cual todavía
vemos como el óptimo canal para tratar las causas de esta crisis política y sus
consecuencias.
Sr. Presidente,
El informe elaborado por el Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos en base a una invitación remitida por
parte de Qatar fue contestado con una declaración detallada y entregada al Alto
Comisionado. Asi mismo, hemos expresado los puntos de vista de nuestros países sobre
el contenido del citado informe, mediante una declaración de prensa conjunta en
nombre de la Delegación Permanente de los cuatro países que boicotean a Qatar.
Los qataríes han de elegir entre ser un Estado que cree en el principio de la
buena vecindad, que trate de entablar una relación positiva con su entorno,
como son los países del resto del mundo civilizado o continuar violando el
derecho internacional, los convenios y los tratados internacionales y
regionales relacionados con la lucha contra el terrorismo, su financiación y
sus patrocinadores, puesto que Qatar no puede llevar a cabo un hecho y su
contrario al mismo tiempo.
Sr. Presidente,
Los cuatro países desean hacer hincapié en el papel que
juega Qatar en cuanto a su apoyo a las ideologías extremistas, a las ideas del
terrorismo, a la difusión de mensajes de odio y a la incitación a la violencia
a través de los medios de comunicación. Lo que nuestros países quieren reside
en que Qatar cambie su comportamiento basado en apoyar a las organizaciones
terroristas y detenga inmediatamente su financiación. De igual manera, les instamos,
desde este foro internacional, a no convertir a Doha en un lugar para abrazar a
individuos que justifiquen los actos terroristas.
Sr. Presidente,
Qatar, que no deja de hablarnos del respeto de la
dignidad humana y de los derechos de los pueblos a determinar su destino, es el
mismo país que acoge a los líderes de la organización internacional de los
Hermanos Musulmanes, de quienes el mundo ha visto únicamente un pensamiento
oscurantista que ha ofrecido a la humanidad unas organizaciones terroristas
como Al Qaeda, de la que se han ramificado otros grupos terroristas, no menos criminales
y oscurantistas, como son los grupos terroristas Daesh y el Frente Al-Nusra. Por ello, nuestros países seguirán ejerciendo su soberano
derecho a boicotear al gobierno de Qatar en defensa del daño y perjuicio
intencionados contra la seguridad de nuestros países, la intervención en
nuestros asuntos internos y la falta de respeto por parte de Qatar del
principio de la buena vecindad, considerado como un principio fundamental en
las relaciones internacionales.
Muchas gracias Sr.
Presidente.